Estas son las razones sociales de las empresas que solicitaron al BANADE créditos que nunca terminaron de pagar, si es que empezaron a pagarlo alguna vez y si es que acaso pensaban hacerlo. La liquidación del Banco Nacional de Desarrollo durante el gobierno de Carlos Menem les facilitó las cosas. Gaglianone Establecimiento Gráfico SACI es actualmente la recuperada Cooperativa de Trabajo Chilavert Artes Gráficas Ltda., mientras que Electrodomésticos Aurora SA fue rebautizada por los trabajadores como Cooperativa de Trabajo Renacer Ltda. A excepción de Sasetru, todas las demás hoy son también cooperativas de trabajo, pero conservan en su nominación alguna referencia al nombre de fantasía utilizado por la patronal y se encuentran dispersas por el país, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en las provincias de Buenos Aires, Neuquén y Tierra del Fuego.
Salvo por los montos involucrados en el caso de Sasetru –una gigantesca empresa dedicada al rubro alimenticio, que supo ser una de las principales exportadoras del país–, la familia Iurcovich es la que más dinero le adeuda al BANADE, como consecuencia del préstamo que gestionara a través del EAM 78 para la financiación del 79% de la construcción del hotel. El origen de esa deuda fue un préstamo de ocho millones de pesos que los trabajadores calcularon que, hacia 2012, con los intereses actualizados, representaba unos 170 millones de pesos1.
La operación, iniciada mediante el contrato celebrado el 30 de noviembre de 1976, se realizaba bajo la modalidad de la Circular VI.2.158, una normativa ad hoc diseñada por el BANADE. El juez, en la sentencia que falló a favor de los ex dueños, lo resumió de la siguiente manera:
Los créditos fueron diseñados en condiciones excepcionales de benignidad, esto es, estructurados con la finalidad específica y declarada de servir de fomento a la construcción de hoteles en la Capital Federal, Mendoza y Rosario para el XI Campeonato Mundial de Fútbol. Por ello, estos préstamos de fomento fueron sometidos a una reglamentación especial (Circular VI.2.158), la que adoptó como base de ajuste del capital la variación de la cotización bursátil de los Valores Nacionales Ajustables; variación que, según quedó señalado, en el considerando X de este voto, era muy inferior a la evolución de los precios mayoristas2.
Es decir, el proyecto bajo el cual se concibió el préstamo preveía un escenario de inflación decreciente, muy distinto al que realmente tuvo lugar.
En efecto, fue la creciente inflación de comienzos de los ochenta la que llevó al BANADE a aplicar regímenes de indexación que le favorecieran, para intentar preservar sus activos.
- Manuel Alfieri, “Los que piden desalojar al Bauen le deben al Estado $170 millones” en diario Tiempo Argentino, 21 de octubre de 2012, pp. 24-25.↩
- CNCyCom, Sala II, “Bauen SACIC c/ Banco Nacional de Desarrollo s/ cumplimiento de obligación crediticia”, causa 8641/IV, fs. 2997, abril de 1997, fallo del juez Eduardo Vocos Conesa al que también adhiere la jueza Marina Mariani de Vidal.↩