Aquí es donde aparece la figura de Marcelo Iurcovich: según publicó el periodista Santiago O´Donnell en el diario Página/121, sus excelentes relaciones con el gobierno militar, en especial con el brigadier Osvaldo Cacciattore, por entonces intendente de facto de la Ciudad de Buenos Aires, y con el capitán de navío –luego contraalmirante– Carlos Alberto Lacoste, que estaba al frente del EAM 782, le permitieron a Iurcovich conseguir un crédito muy favorable del BANADE para la construcción de un hotel cinco estrellas en pleno centro de la capital.
La investigación de O´Donnell señala que, tras la muerte de Marcelo Iurcovich, su hijo Hugo pasó a ser la cara visible del grupo.
Quienes lo conocen dicen que mantiene cierta rebeldía en su forma de ser y algo de onda hippie, quizá producto del tiempo que pasó en Buzios armando el negocio de un megaresort. Sus amigos dicen que Hugo se sentía a gusto con gente de la farándula, sin abandonar el bajo perfil que caracteriza a la familia, y tal vez por eso habría volcado su vocación artística en los negocios relacionados con el entretenimiento, como sugiere su participación en los directorios de empresas como Deporcor y Organización de Eventos, a la que sumaría la actividad inmobiliaria a través del directorio de Sedaguma y Suma3.
Continúa O’Donnell en su precisa descripción de los negocios de la familia Iurcovich:
La esposa de Marcelo y madre de Hugo, Raquel Kaliman, también incursionó en el negocio inmobiliario, a través de la firma Consultex, inscripta con domicilio en las oficinas del grupo en Corrientes al 1500. Compartió el directorio de Consultex con el contador Sterin y con Alejandro Granillo Ocampo, familiar del ex funcionario polifuncional del gobierno de Carlos Menem, Raúl Granillo Ocampo. Al parecer, Kaliman no eligió al socio más solvente, ya que Alejandro preside (y Raúl estuvo en el directorio de) la constructora riojana Construnoa, que presenta créditos de categoría irrecuperable por más de 2 millones de pesos.
También vincula a los Iurcovich, en una etapa más reciente, con los negocios inmobiliarios en Puerto Madero a través de la compañía Sycic, “un desprendimiento accionario de la empresa familiar Poliequipos” y accionista de las constructoras JM Aragón, Dique 1 y Puerto Santo. En cuanto a Poliequipos, se trata de una empresa dedicada al mantenimiento de clínicas y hospitales que salió del anonimato el 30 de junio del 2005, durante un episodio en el que dos pacientes del Hospital Santojanni fallecieron a raíz de un error cometido durante estas tareas de mantenimiento, según lo expresó el diario Clarín4.
- Santiago O’Donnell, “El padre, el hijo y un espíritu non sancto”, en Página/12, 21 de agosto de 2007.↩
- Las atribuciones del EAM 78 en referencia a los créditos a los empresarios privados se especifican en el Decreto 1261/77, B.O. del 27 de mayo de 1977.↩
- Santiago O’Donnel, ob. cit.↩
- “Citan a indagatoria a cinco imputados por las muertes en el hospital Santojanni”, en diario Clarín, 11 de septiembre de 2006. Recuperado de http://www.clarin.com/ultimo-momento/citan-indagatoria-imputados-muertes-hospital-santojanni_0_Bklt9QkAKx.html↩