Las maniobras de encadenamiento entre firmas que se compran y se venden de manera de ocultar a los verdaderos dueños y el origen de los capitales, los préstamos de entidades bancarias públicas jamás pagados, las condonaciones de deuda o su traspaso al Estado, los juicios al Estado para trabar los reclamos (algo así como el ladrón gritando “atrapen al ladrón”), son las típicas maniobras por las que los grupos empresarios de la llamada “patria contratista” crecen a costa del patrimonio público y se enriquecen sin arriesgar más que mínimas porciones de capital (en el mejor de los casos). Los Iurcovich no son una excepción, sino casi un actor menor comparado con el propio grupo Macri, que hizo de este modus operandi una constante1 y hace quedar a Marcelo Iurcovich casi al nivel de un aprendiz.
Este tipo de maniobras, no por casualidad, están en el origen de varias empresas posteriormente recuperadas por los trabajadores, con el BANADE (y los trabajadores estafados y condenados al desempleo) haciendo el papel de mascarón de proa del Estado bobo. La historia de las recuperadas se suele entrelazar a raíz de los lazos solidarios que entablan los trabajadores de unas y otras durante los procesos de recuperación. Pero mucho antes, cuando trabajaban bajo las órdenes de sus patrones, muchas de las empresas preexistentes ya empezaban, sin saberlo sus empleados, a compartir ciertos elementos que dan cuenta de los flujos económicos y financieros de una etapa de la historia económica reciente del país. Los trabajadores del Bauen recuperarán el hotel tras conocer la historia de la imprenta recuperada Chilavert, en una reunión convocada por los obreros gráficos y realizada en la misma imprenta, pero el nombre de ambas empresas ya figuraba en los legajos del Banco Nacional de Desarrollo en los que se consignaban los préstamos otorgados a los empresarios que las explotaban.
En un documento del año 2001, que actualizaba los montos adeudados en pesos (pesos-dólares de la convertibilidad) al año 2000, se pueden encontrar dispersos –entre las 1.325 compañías deudoras, una verdadera multitud– los siguientes datos correspondientes a empresas que fueron o intentaron ser ocupadas y recuperadas:
Bauen SACIC (Legajo 46.414), con un vencido total de $85.476.895 y en situación 52;
Viniplast SAIC (Legajo 49.170), con un vencido total de $4.383.493 y en situación 5;
Hilanderías M.G. SA (Legajo 49.365), con un vencido total de $2.818.226 y en situación 5;
Cerámica Zanon SACIM (Legajo 45.959), con un vencido total de $125.739 y en situación 5;
Cerámica Stefani Cutral-có SACIFA (Legajo 46.555), con un vencido total de $924.690 y en situación 5;
Gaglianone Est. Gráfico SACI (Legajo 42.082), con un vencido total de $13.669;
Sasetru SACIFIAE (Legajo 28.128), con un vencido total de $26.144.239 y situación 6;
Elecrodomésticos Aurora SA (Legajo 33.210), con un vencido total de $3.819.984 y en situación 6;
Frigorífico Minguillón SA (Legajo 37.879), con un vencido total de $59.733.947 y en situación 6;
Frigorífico Yaguané SACIFA (Legajo 43.104), con un vencido total de $42.246.746 y en situación 6.
- Como demuestra, por ejemplo, el caso de la condonación de deuda por el Correo Argentino consumada por Mauricio Macri a su propia familia al llegar al poder y que estalló en febrero de 2017.↩
- La situación 5 corresponde a las deudas judicializadas y la 6 a las que se estaban todavía disputando en procesos de quiebra.↩